lunes, 2 de marzo de 2009

Crónica de mi Transgrancanaria Sur-Norte 2009.

Llegó el gran día. Estaba nervioso, cómo ya he comentado en anteriores ocasiones, mi primera carrera oficial hasta ese día había sido la Media Maratón de Las Palmas 2009. No sabía si podría ser capaz de afrontar una distancia de 92 kilómetros en una carrera de montaña. Mi mayor distancia corriendo había sido un entrenamiento de 30 kilometros, desde Maspalomas hasta Tunte, el paso mes de Enero.

Llegamos al aparcamiento del Centro Comercial Anexo II, en Playa del Inglés. Nada más llegar, nos pusimos a buscar a Carolina, que es la mujer de un compañero de trabajo de Javi Marín, y que nos había ofrecido unas polainas para poder correr por la arena. Desde aquí agradecer a Carolina y a su novio, el habernos conseguido dichas polainas, y felicitarla por el tercer puesto conseguido en su categoría (Elite femenina, Transgrancanaria Sur-Norte).

Foto con mi mujer, Vane.

En línea de meta, coincidimos con otros componentes de Bichillo Runner, Aarón, Tony, Bena, Aarón Martín y Luis.


Foto de Bichillo Runner
(de izqda. a dcha. Aarón López, Javi Marín, Javi Perera, Aarón Martín, Bena, Tony)


Queda poco para la salida. Apenas 5 minutos, estoy entre eufórico y nervioso. Sé que desde que empiece a correr, se me quitará. Quedan muchos kilómetros por delante, muchas horas, muchas sensaciones.

Nos despedimos de nuestras respectivas parejas, y bajamos hasta la arena, para tomar la salida.

Frontales encendidos, luces rojas encendidas, cerca de 500 participantes, ponen música por megafonía (Banda sonora de Rocky), ¡¡¡joder que guapo!!!, ¡¡¡ Qué empiece ya!!!

Por fin, se da la salida, tardamos alrededor de 30 segundos en pasar por debajo del arco de salida. Voy mirando de un lado a otro, buscando a Vane y a Diana (mi mujer y la novia de Javi Marín). De repente me gritan, sorpresa, son ellas. "Adiós, Nos vemos en meta", pensé.

Vamos a buen ritmo por la orilla de la playa. Son unos cuantos kilómetros hasta el faro de maspalomas. De vez en cuando miro hacia atrás, es increíble lo bonito que se ve la serpiente de luces blancas, por la orilla. También, una serpiente de luces rojas, por delante. Llegamos bien al faro, aunque con pequeñas molestias en las rodillas, y en la parte superior de los cuádriceps, pero seguro que se quitarán una vez que entremos en un terreno un poco más duro. Nos quitamos las polainas, y corremos paralelo al canal de Maspalomas.

Por el canal, vamos cinco bichillos corriendo (Aarón, Tony, Bena, Javi Marín y yo). Pienso que el ritmo es alto, creo que deberíamos de ser un poco más conservadores, son muchos kilómetros y apenas llevamos 7.

De repente, nos encontramos de frente, con Vane y Diana, han ido hasta el canal (eso sí, en coche). ¡¡¡Joder!!!, que subidón dá verlas.

Los bichillos (Aarón, Tony y Bena), van fuertes. Javi y yo, vamos a buen ritmo, un poco más lentos, por lo que nos separamos. Mi meta es llegar a Pico de Las Nieves, si llego a ese punto, sin estar lesionado, seguro que termino, sé que puedo hacer una buena bajada, o por lo menos llegar.
Todos los corredores, vamos en silencio, concentrados en cada paso que vamos dando, el Barranco es una auténtica trampa, un mal paso y te dejas el tobillo.

Hemos entrenado este tramo ya una vez, pero de noche, es muy diferente, empieza a hacer frío,y al no tener una referencia visual del camino, me desespero un poco, ya que no sé cuánto falta para llegar a la subida del final del barranco.

Por fin, llegamos, para afrontar la primera subida dura, sacamos bastones e intentamos imprimir un ritmo alto. Se hace un poco larga, pero aguantamos bien. Ya llevamos aproximadamente 19 kilometros, solo nos quedan 2 kilometros hasta Ayagaures.

Tiempo en Ayagaures, 2 horas y 43 minutos. Buen tiempo para nuestras expectativas, que no es otra sino la de acabar en 16-17 horas. Cuando entrenamos este tramo en Enero, con Aarón Martín, hicimos 2 horas y 28 minutos, pero saliendo desde el centro de salud de Maspalomas, es decir 7 kilometros menos. Pensábamos pasar por aquí a las 3 horas y 30, por lo que hemos rebajado en 45 minutos lo esperado.

Llenamos el bidón de agua de la cuba que nos ofrecen los militares. Y seguimos.

La parte que vamos a afrontar ahora, para mí, es la más complicada, son 12 kilómetros de subida, y la mayor parte discurre por unos senderos, donde tenemos que ir en fila india. Vamos hablando con un participante de la Transgrancanaria de 123km, es de Granada. Yo hablo poco, me límito más bien a escuchar, el ritmo es bueno, pero no voy muy cómodo, creo que es el frío.

Cada vez hace más frío, y Javi Marín sube bastante fuerte, en algún momento casi no puedo seguirlo. Vamos encontrando a gente con "pájaras". Voy comiendo trozos de mis barritas de plátano, que me sientan muy bien, y bebo agua continuamente. El frío me afecta bastante, no me gusta, me bloquea. Me encanta hacer deporte con sol, con calor. Se me pasa por la cabeza, decirle a Javi, que siga tirando, que yo voy a bajar el ritmo un poco, porque el frío me mata. Pero aguanto un poco más.

No me lo creo, ya estamos a la altura del Pino de Pilancones, qué alegría. Todavía queda un tramo de subida, pero no reconozco los puntos de referencia, se me está haciendo largo. De noche se ve muy poco. Por fin, ¡¡¡milagro!!!, llegamos a la pista que nos llevará hasta la degollada de la Manzanilla.

De aquí hasta Tunte, son apenas 4 kilómetros bajando. A media bajada, coincidimos con Carolina (la chica que nos dió las polainas), que está cambiando las pilas al frontal. Tengo que decir, que no era una frontal, era una farola. ¡¡¡ Cómo iluminaba !!!.

Llegamos a Tunte. Kilómetro 36 de carrera, con un tiempo de 5 horas y 50 minutos. ¡¡¡ Qué buen tiempo!!!, cuando lo entrenamos lo habíamos hecho en 5 horas 30 minutos, mas 1 hora del tramo de la playa. Es decir, todavía conservamos los 45 minutos de ventaja.

Me duelen las rodillas, pero intento olvidarme del dolor, ya se me quitará.

Vemos a Aarón, Tony y Bena, que ya salen en dirección a Cruz Grande.

Llenamos los camelback, lleno el bidón de aquarius, y me fijo en lo que come Javi Marín. No sé qué comer, no tengo la experiencia de lo que me puede sentar bien o mal. Cojo, un trozo de naranja, y un trozo de plátano, además de un trozo de bocadillo de salami. ¡¡¡Qué Banquete!!!. Cuando termino de comermelo todo, voy a por otro trozo de bocadillo, y un vasito de caldo. ¡¡¡Tengo hambre!!! Son casi las 6:00 de la mañana.

Después de 15 minutos, salimos en dirección a Cruz Grande, para continuar por el camino de la Plata, y llegar a Pico de las Nieves.

Un par de kilómetros antes de llegar a Cruz Grande, a Javi Marín, le empiezan a dar fuertes retortijones de barriga. Bajamos el ritmo. Llega un momento, en que tenemos que parar, para intentar "dar de cuerpo". Lo consigue a duras penas, o mejor dicho, a flojas penas, tiene diarrea. El frío está haciendo mella en mis rodillas.

Continuamos, pero al llegar a Cruz Grande, otra vez tenemos que parar. Son casi las 7:00 de la mañana, está amaneciendo.

Al final del camino de la plata, otra parada obligatoria, el pobre Javi Marín, se está "cagando tó", ¡¡¡Qué putada!!!, quiere seguir a ver si en el Garañón le pueden dar una pastilla para cortar las diarreas.

Conseguimos llegar hasta Pico de Las Nieves, Javi Marín, va bastante tocado. Yo me encuentro bastante bien, mientras estoy en marcha, el dolor de las rodillas parece que se alivia. Ya no llevamos tan buen tiempo, aún así, pienso que podemos todavía conseguir el objetivo de 16 horas que nos habíamos marcado.

En Pico de las Nieves, nos pasa Arnau Juliá, primer clasificado hasta ese momento de la Trans de 123 km. Pocos minutos después, nos pasa Aguiló, el segundo clasificado de la Trans de 123 km hasta ese momento, y que finalmente será el ganador.

En una de estas, se me resbala la zapatilla, y ¡¡¡zás!!!, me caigo de espaldas, menos mal que llevo la mochila, y no me hago daño, solo unos rasguños al reloj, y en las piernas, nada importante.

Llegamos al Garañón, a las 9:30 de la mañana. ¡¡¡SUBIDON!!!!, están Vane y Diana, no esperaba que fueran a venir hasta aquí. Estoy pletórico,me veo con fuerzas, sé que puedo terminar.

Comemos pasta.

Javi Marín vuelve a ir al baño.

Encima, en la enfermería no tienen pastillas para cortar las diarreas. ¡¡¡Qué putada!!!, Javi lo está pasando mal. Nos cambiamos de ropa, para afrontar la bajada, me pongo licras cortas y la camisa de Bichillo Runner.

Salimos del Garañón, 45 minutos después de haber llegado, hemos perdido mucho tiempo, es una parada muy larga. Incluso ya han salido los corredores de la Media Trans, que era a las 10:00.

Cuando ya llevábamos 25 o 30 minutos recorridos, Javi Marín, me dice que me vaya, que él se está apurando porque me ve que yo estoy con fuerzas, y él no encuentra el ritmo. Hacemos un pacto, me voy con la condición, de que no se retire.

Sé que no se va a retirar, Javi Marín, es un tío con mucha experiencia, con mucho coraje y muy fuerte.

Me encuentro bien, un poco arrepentido de irme, y haberlo dejado atrás, después de tanto tiempo entrenando juntos, pero bien es verdad, que sé, que sufre más intentando ir a mi ritmo, ritmo que casi no puede seguir. Al fin y al cabo, es un hasta luego, sé que él va a llegar a meta y nos veremos allí.

Empiezo a bajar fuerte, parece mentira pero no parece que mis piernas hayan devorado ya, casi 50 kilómetros y 10 horas y media.

Llego al mirador, y me veo a Vane y Diana, les digo que Javi viene detrás, y le comento lo que acordamos. Voy muy fuerte.

Subida después del mirador

Llego a Cruz de Tejeda, voy bastante rápido. Llego a la parte del recorrido que más me gusta, la zona que vá desde la Cruz de Tejeda hasta Teror. Es un camino serpenteante, con piedras y barro. En ese punto alcanzo a Jorge (primo de Vane, que salió de la media Trans a las 10 desde el Garañón).

Voy pasando corredores, tanto de la Media, como de la Sur-Norte. Voy escalando puestos.

Poco antes de llegar a Teror


Llego a Teror. 12 horas y 10 minutos. Como frutos secos, plátanos y naranja. Lleno el camelback, lleno el bidón de aquarius, y después de 10 minutos sigo para Las Palmas. Eso sí, antes de continuar, entro en la iglesia, para visitar a la Virgen del Pino.

Voy a buen ritmo. En Osorio me encuentro a "Padre Luis", de Bichillo Runner, le pregunto que qué tal va. Me dice que está un poco fastidiado de la garganta, que simplemente va. Me comenta que Aarón, Tony y Bena, van bastante más adelantados. Me despido de él, y continúo.

Hace calor, pero cómo ya he dicho, me encanta el calor. Voy pasando corredores de la Sur-Norte que van bastante tocados. Yo creo que el haber subido más despacio, por el contratiempo de Javi Marín, me ha permitido llegar con tantas fuerzas a este punto de la carrera.

Pasando el Barranco del Pino, antes de la acequia, me encuentro con los tres bichillos (Aarón, Tony y Bena), ¡¡¡qué sorpresa!!!, yo ya los hacía en meta. Aarón me comenta, que están "petados", la bajada se les está haciendo muy dura.

Llego a la subida del Barranco de Tenoya, menos mal que en este tramos han puesto una cuerda. Esta subida en este punto de la carrera, se hace muy dura. Son casi 75 km, lo que llevan mis piernas encima. Justo aquí, hay un punto de avituallamiento. Me como 1 trozo de naranja, y sigo.

Llego a los Giles, 84 kms, de carrera, ya que quedan apenas 5 kilómetros.

Le mando un mensaje a Vane, le digo que en 30 o 35 minutos estaré llegando.

Voy alcanzando corredores. Me uno a un grupo, de 4 corredores de la Sur-Norte, me preguntan por la edad, les digo que 34. Uno de ellos me dice, que siga, que siga, que como él está en la categoría de Master 40, no le voy a ganar ningún puesto. La subida la hago caminando, aun así, les saco algunos metros. Oigo, como uno de ellos, le dice al otro, que me dejen, que ya me cogerán en la bajada. Incluso uno llega a decir "Mira las piernitas que tiene, ahora en la bajada lo cogemos". No sé si fué ese comentario, o el ver la imagen de la playa de las Canteras al fondo, que pensé, "Por los cojones, me vas a coger". Creo que nunca hay que subestimar a nadie, he visto a gente más gorda, o más vieja, o mas fea, o más guapa que yo, ganando carreras, y consiguiendo objetivos que yo jamás conseguiré.

Quién diría, viendo a Marco Olmo, que un tipo con esas características pueda correr tanto. Qué portento.

Pues bien, desde que empecé a correr en la bajada, no pudieron seguirme. Tengo las piernas finitas, pero por lo menos hoy, y a estas alturas de la carrera las tengo fuertes. ¡¡¡Hasta luego piernas gorditas, cógeme ahora si puedes.!!!

Llegué a alcanzar a otro corredor en la bajada de los Giles. Bajaba caminando, y yo corriendo. Cuando llegué al último kilómetro llano, me paré a caminar y aproveché a comerme un último trozo de barrita de plátano y un sorbo de agua. Me quedé sin agua, la acabé en este último sorbo.

Me que da un último kilómetro de asfalto, con mucho calor.

Giro, la cabeza, y veo al corredor que en la bajada iba caminando que empieza a correr para intentar alcanzarme. Empiezo yo a correr, casi no puedo levantar las piernas, sé que me queda poco. Le voy aguantando la distancia, pero no deja de correr, por lo que me veo obligado a seguir corriendo. Llego al aparcamiento de tierra del auditorio, tengo distancia suficiente.

Vane, me está esperando poco antes de la meta, corre en paralelo conmigo, estoy muy emocionado. Nunca antes había corrido más de 30 kilómetros, y lo he conseguido, 89 kilómetros. No me lo creo. Tengo lágrimas en los ojos, sí soy un llorón, no me importa reconocerlo, me emociono con facilidad.



Subo los 6 peldaños del podium, y entro con un tiempo de 14 horas, 38 minutos y 3 segundos. ¡¡¡Un tiempazo!!! Brazos en alto, grito, me desahogo. Quedo en el puesto 35 de 170 participantes, no está nada mal.



Estoy exhausto. No me esperaba este tiempo. Sólo queda esperar por Javi. Pido hora para el masaje, tardarán un par de horas hasta que me toque. Ahora noto el dolor de las rodillas, antes sólo notaba la pesadez de las piernas, pero ahora empiezo a notar los dolores.

Después de 15 horas y 52 minutos, llegaron los bichillos, Aarón, Tony y Bena.



Un poco mas tarde, después de 16 horas y 7 minutos, llegaba Javi Marín. ¡¡¡Qué mérito tiene!!! ¡¡¡Qué fortaleza!!!, siento rabia de que le haya pasado esto, porque sé, que si hubiera estado bien, hubiésemos bajado de 14 horas. Me emocioné al verle llegar, (si, lagrimitas en los ojos), estaba convencido de que no abandonaría.

Llegada de Javi Marín.

Llegó muerto, dijo que en Teror no pudo comer nada. Justo, le apunté para la sesión de masaje, pero ya no le aseguraban que se lo dieran en el día, ya que la lista de espera era larga. Casualmente, 5 minutos después me tocaba mi masaje. Le cedí el puesto. Se lo había ganado, él se merecía ese masaje más que yo.

Aarón López, Javi Marín y yo

Felicidades a "Padre Luis", que llegó con un tiempo de 5 horas y 28 minutos, 5º en su categoría de Master 50. Tiene mucho mérito.
También quiero felicitar a las chicas de Bichillo, enhorabuena por ese podium conseguido.

Ánimo para Aarón Martín, que tuvo que abandonar en Teror. Qué poco te faltó. El año que viene seguro que lo consigues.

Gracias a todos los bichillos, no sólo a los corredores, también a los padres, madres, novios, novias, fotografos, y todos los que estuvieron dándonos ánimos por allí. Espero seguir compartiendo momentos con todos ustedes, e ir conociéndolos cada vez más.

Lo siento si alguno se aburre con la crónica, porque es muy larga. Pero es que, la carrera lo fué.

1 comentario:

  1. Gracias por compartir tus experiencias. También me has arrancado alguna lágrima (siento defraudarte si pensabas que un IM no llora).
    Ahora a recuperarse bie y...ánimo para seguir entrenando e ir cumpliendo objetivos que te hagan más fuerte, no solo como atleta sino como persona.

    Un saludo.

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